domingo, 30 de noviembre de 2008

crimen financiero contra la humanidad


+++El siguiente articulo no es mío y no habla de Santa Ana Maya, no directamente. Pero si habla del mundo. Muy a propósito de la situación económica global . Así que allá va.+++


Crimen (financiero) contra la humanidad por José Saramago*
Crimen contra la humanidad es el que los poderes financieros y económicos de Estados Unidos, con la complicidad efectiva o tácita de su gobierno, fríamente han perpetrado contra millones de personas en todo el mundo, amenazadas de perder el dinero que les queda después de, en muchísimos casos (no dudo de que sean millones), haber perdido su única y cuántas veces escasa fuente de rendimiento, es decir, su trabajo.17 de octubre de 2008Herramientas _________________________________________________
*El escritor, pensador y Premio Nobel de literatura, José Saramago, nos advertía ya en el prefacio del libro «El Nerón del Siglo XXI», que está «internacional de la mentira», compuesta por una verdadera mafia politico-financiera internacional muy poderosa por su fuerza de manipulación mediática. Es decir, una verdadera amenaza para la libertad y desarrollo de la Humanidad. ________________________________________________
La historia es conocida, y, en aquellos tiempos antiguos en que la escuela se proclamaba educadora perfecta, se le enseñaba a los niños como ejemplo de la modestia y la discreción que siempre deberían acompañarnos cuando el demonio nos tentara para opinar sobre lo que no conocemos o conocemos poco y mal. Apeles podía consentir que el zapatero le apuntase un error en el calzado de la figura que había pintado, por aquello de que los zapatos eran su oficio, pero que nunca se atreviera a dar su parecer sobre, por ejemplo, la anatomía de la rodilla.En suma, un lugar para cada cosa y cada cosa en su lugar. A primera vista, Apeles tenía razón, el maestre era él, el pintor era él, la autoridad era él, mientras que el zapatero sería llamado cuando de ponerle medias suelas a un par de botas se tratase. Realmente, ¿hasta dónde vamos a llegar si cualquier persona, incluso la más ignorante de todas, se permite opinar sobre lo que no sabe? Si no tiene los estudios necesarios es preferible que se calle y deje a los sabedores la responsabilidad de tomar las decisiones más convenientes (¿para quién?).Sí, a primera vista Apeles tenía razón, pero solo a primera vista. El pintor de Felipe y de Alejandro de Macedonia, considerado un genio en su época, ignoró un aspecto importante de la cuestión: el zapatero tenía rodillas, luego, por definición, era competente en estas articulaciones, aunque fuera solo para quejarse, si ese era el caso, de los dolores que sentía. A estas alturas, el lector atento ya habrá entendido que no es de Apeles ni del zapatero de lo que se trata en estas líneas.Se trata, sí, de la gravísima crisis económica y financiera que está convulsionando el mundo, hasta el punto de que no podemos escapar a la angustiosa sensación de que llegamos al final de una época sin que se consiga vislumbrar qué y cómo será lo que venga a continuación, tras un tiempo intermedio, imposible de predecir antes de que se levanten las ruinas y se abran nuevos caminos. ¿Cómo lo hacemos? ¿Una leyenda antigua para explicar los desastres de hoy?¿Por qué no? El zapatero somos nosotros, todos nosotros, que presenciamos, impotentes, el avance aplastante de los grandes potentados económicos y financieros, locos por conquistar más y más dinero, más y más poder, con todos los medios legales o ilegales a su alcance, limpios o sucios, normalizados o criminales.¿Y Apeles? Apeles son, precisamente, los banqueros, los políticos, las aseguradoras, los grandes especuladores que, con la complicidad de los medios de comunicación social, respondieron en los últimos 30 años, cuando tímidamente protestábamos, con la soberbia de quien se considera poseedor de la última sabiduría; es decir, aunque la rodilla nos doliera, no se nos permitía hablar de ella, se nos ridiculizaba, nos señalaban como reos de condena pública.Era el tiempo del imperio absoluto del Mercado, esa entidad presuntamente auto reformable y auto regulable encargada por el inmutable destino de preparar y defender para siempre jamás nuestra felicidad personal y colectiva, aunque la realidad se encargase de desmentirlo cada hora que pasaba.¿Y ahora? ¿Se van a acabar por fin los paraísos fiscales y las cuentas numeradas? ¿Será implacablemente investigado el origen de gigantescos depósitos bancarios, de ingenierías financieras claramente delictivas, de inversiones opacas que, en muchos casos, no son nada más que masivos lavados de dinero negro, de dinero del narcotráfico? Y ya que hablamos de delitos: ¿tendrán los ciudadanos comunes la satisfacción de ver juzgar y condenar a los responsables directos del terremoto que está sacudiendo nuestras casas, la vida de nuestras familias, o nuestro trabajo?¿Quién resuelve el problema de los desempleados (no los he contado, pero no dudo de que ya son millones) víctimas del crash y qué desempleados seguirán, durante meses o años, malviviendo de míseros subsidios del Estado mientras los grandes ejecutivos y administradores de empresas deliberadamente conducidas a la quiebra gozan de millones y millones de dólares cubiertos por contratos blindados que las autoridades fiscales, pagadas con el dinero de los contribuyentes, fingen ignorar?Y la complicidad activa de los gobiernos, ¿quién la demanda? Bush, ese producto maligno de la naturaleza en una de sus peores horas, dirá que su plan ha salvado (¿salvará?) la economía norteamericana, pero las preguntas a las que tendría que responder están en la mente de todos: ¿no sabía lo que pasaba en las lujosas salas de reunión en las que hasta el cine nos ha hecho entrar, y no solo entrar, sino asistir a la toma de decisiones criminales sancionadas por todos los códigos penales del mundo?¿Para qué le sirven la CIA y el FBI, además de las decenas de otros organismos de seguridad nacional que proliferan en la mal llamada democracia norteamericana, esa donde un viajero, a su entrada en el país, tendrá que entregar a la policía de turno su ordenador para que este copie el respectivo disco duro? ¿No se ha dado cuenta el señor Bush que tenía al enemigo en casa, o, por el contrario, lo sabía y no le importó?Lo que está pasando es, en todos los aspectos, un crimen contra la humanidad y desde esta perspectiva debe ser objeto de análisis, ya sea en los foros públicos o en las conciencias. No exagero. Crímenes contra la humanidad no son solo los genocidios, los etnocidios, los campos de muerte, las torturas, los asesinatos selectivos, las hambres deliberadamente provocadas, las contaminaciones masivas, las humillaciones como método represivo de la identidad de las víctimas.Crimen contra la humanidad es el que los poderes financieros y económicos de Estados Unidos, con la complicidad efectiva o tácita de su gobierno, fríamente han perpetrado contra millones de personas en todo el mundo, amenazadas de perder el dinero que les queda después de, en muchísimos casos (no dudo de que sean millones), haber perdido su única y cuántas veces escasa fuente de rendimiento, es decir, su trabajo.Los criminales son conocidos, tienen nombre y apellidos, se trasladan en limusinas cuando van a jugar al golf, y tan seguros están de sí mismos que ni siquiera piensan en esconderse. Son fáciles de sorprender. ¿Quién se atreve a llevar a este gang ante los tribunales? Todos le quedaríamos agradecidos. Sería la señal de que no todo está perdido para las personas honestas.José SaramagoPremio Nobel de Literatura.

viernes, 14 de diciembre de 2007

Todo pueblo tiene el gobierno que quiere tener.

Todo pueblo tiene el gobierno que quiere tener.

Si, aun cuando pareciera un absurdo, pero en realidad la ciudadanía es quien a final de cuantas determina el buen o mal funcionamiento de su gobierno. La anterior aseveración resulta de la siguiente reflexión, quién si no, la ciudadanía a través del sufragio hace que ascienda al poder determinado candidato, de allí la importancia que cada que se acercan nuevas elecciones, éstos, de buenas a primeras se conviertan en la mejores personas, tratando con sus buenas intenciones a todo aquel ciudadano que encuentra a su paso, cuando durante quizá 30 años atrás jamás tuvieron la intensión de hacerlo, ¡pero de pronto existimos para ellos, entonces si somos importantes!, incluso se toman la molestia de organizar algunas comidas, cenas y traen algún grupo musical para captar nuestra atención, realizan promesas, ahora muy de moda por escrito y con la correspondiente firma del candidato aspirante, sin embargo, es triste ver que aun así no se cumplen , puesto que al momento de favorecerles el voto de la mayoría , y logran así su cometido de llegar a la Presidencia Municipal, también desaparecen las promesas aun cuando fuesen pactadas por escrito; y ahora cambian los papeles, puesto que es el ciudadano quien tiene que brindar su mejor cara al ahora Presidente, a fin de recordarle su compromiso para con la ciudadanía , pero curioso es que el gobernante sabe como calmar y apaciguar la exigencia de un ciudadano o de un grupo de ciudadanos –tomando como instrumento de apoyo el egoísmo del ser humano- que mientras obtiene un beneficio personal se olvida de aquellas obras u acciones que protejan al mayor número de ciudadanos posible.
Por ello es cada vez menos visible el avance de una administración, pues a fin de tenernos contentos y no presentarles problemas se han creado un sin fin de apoyos sociales, con los cuales, incluso, no se alcanza a apoyar a toda la población y si se dejan de realizar obras de verdadero impacto social. Un ejemplo: si durante la campaña el entonces candidato promete la creación de fuentes de empleo, primeramente no refiere qué tipo de empleos y los mecanismos para crearlos, pero entonces los gobernados le exigen que cumpla, puesto que ha transcurrido un año de administración y no hay nada que apunte que se esta trabajando sobre el tema, luego, sencillamente, el gobernante ofrece se reciba un apoyo de 200 ó 300 pesos mensuales en tanto se crean las prometidas fuentes de empleo… y hasta allí llego la exigencia, repitiéndose esto en todos los rublos.
Así, la ciudadanía es copartícipe de gobiernos mediocres, pues por el hecho de recibir apoyos basta para restarnos confianza para exigir un buen gobierno. Tenemos conciencia y no podemos, como se dice comúnmente, “morder la mano de quien nos da de comer”. Esa es la estrategia de los gobiernos: nos utiliza para escalar y una vez en el poder nos siguen utilizando para acallar las exigencias sociales básicas. Desafortunadamente este mal se esta extendiendo y es de fácil propagación: es muy sencillo acostumbrarse a recibir, pero entonces ¿dónde queda la dignidad humana?, por qué no trabajar en colectividad y exigir lo que verdaderamente necesita nuestra comunidad, dejando a un lado los beneficios personales ¿será en verdad muy difícil o nosotros nos hemos encargado de verlo así? Pienso que debemos darnos cuenta que las grandes obras son las que verdaderamente vienen a traer el cambio y transformar un Municipio, y no los grandes derroches de dinero en apoyos sociales que, incluso, resultan insuficientes para los que son otorgados, y si fomentan el conformismo y la apatía ciudadana para engrandecer el medio que nos rodea, entonces ¿será que el gobierno que cada pueblo tiene es el que merece?

Por Angélica.

sábado, 3 de noviembre de 2007

El espacio de la Razón, la Mesa de Diálogo



No es justo ni acertado
que se cumpla la voluntad
de quien en lo que ordena
va fuera de todo razonable discurso.
Miguel de Cervantes Saavedra

Con la Mesa de Diálogo, las(os) integrantes de Dame tu Mano han abierto un espacio importantísimo en la vida política y los tiempos de campaña de este municipio: la invitación a la razón. La propuesta es incluyente, plural y propositiva. Se busca hacer de esta mesa –y en su caso de otras- el eje central de la decisión para elegir al candidato y su grupo de trabajo en las próximas votaciones municipales. Pues las preguntas que los candidatos y sus planillas responderán van directo a los problemas que sufre el municipio y a las principales quejas y reclamos de las (os) ciudadanos.
Entonces, esta Mesa no debe tomarse como un escaparate para que los candidatos muestren sus –escasas o ricas- dotes retóricas, donde se griten consignas, slogan´s de campaña y se intente dar prueba del escándalo que pueden lograr con descalificaciones personales -eso ya lo hemos vistos siempre y, por cierto, no es política-. Se tratará de que den a conocer el porqué son ellos los que pueden admiinstrarnos, que sean capaces de argumentar sus propuestas y, con ello, hacerlas claras y comprobables a las y los ciudadanos -¡si, lo sé, es tan obvio!-. Así, el nivel de discurso en la Mesa deja fuera el aspecto moral (si han pecado y cuánto) de los candidatos y sus planillas y tratará de mostrar en todo su esplendor su preparación ético-política (la capacidad de responder y actuar en base a sus ideas y proyectos de justicia). Así, y sólo así, se justificarían el derecho de ser elegidos como nuestros gobernantes.
Pero el pedido de disciplina no es sólo para los candidatos y planillas. La participación de las personas que asistan también se pondrá a prueba -podrán hacer preguntas-. Veremos si los ciudadanos han (fuera máscaras: hemos) dejado atrás el fanatismo partidario y con ello los reproches y la violencia o sus contrarios, la apatía y el escepticismo. El escenario se prestará a todos los tipos de juicios, donde aun la ideología o inclinación política más marcada tendrá un lugar para la palabra argumentada.
Los elementos para que exista un verdadero ambiente político están propuestos: hay un espacio, los actores principales y fundamentales, y la necesidad –imperiosa- del lugar dónde se le de vida a la razón. Si el fin de esta propuesta se perdiera, por cualquier causa, sólo ha de mostrar el grado de madurez y sensatez de las (os) que asistan. Si en verdad se diera esta abertura al diálogo, entonces es de esperar que el siguiente paso en la vida pública de las personas de Santa Ana Maya sea el pedir a los ya representantes en el ayuntamiento, las razones de sus obras, acciones y mandatos; de otra forma ¿por qué habríamos de permitirlos u obedecerlos?

Por Arin B. R.

martes, 9 de octubre de 2007

Santa Ana Maya...leer para escribir y para saber leer.

Parte I
Lo más normal seria comenzar hablando sobre estadísticas, datos y publicidad que se le ha dada al rezago de la lectura en nuestro país; pues bien tan sólo este es una invitación a la lectura que cuenta con algunas ventajas y sugerencias pácticas acerca de este ejercicio mental.
En primer plano, leer es repasar todas y cada una de las representaciones gráficas de los diferentes sonidos que se producen en el habla cotidiana, pero esto va má allá, la lectura nos permite conocer mas nuestro idioma –hablado y escrito-, nos da la oportunidad de de tener mas vocabulario para expresarnos mejor, para establecer mejores y más laras relaciones sociales, además nos permite tener una escritura variada, coherente y objetiva.
De la lengua hablada, podemos decir que es tan cambiante como cada situación que vivimos, y aunque adquirimos modismos y palabras que destrozan nuestra lengua, también se nos de la oportunidad de reinventarla y llevarla hacia la evolución.
En cuanto a la lengua escrita, se puede conocer en ella el transcurso del tiempo, la manera de pensar, los temores, y hasta razones por las que las personas llegaban a quitarse la vida, todo esto se puede encontrar en un texto tan corto como un cuento, una leyenda o hasta en un artículo de periódico.
Además, muchas veces la lectura y la escritura nos deja ver la calidad de planteles y recintos educativos y hasta administraciones gubernamentales, esto es, al pedir información o ver algún texto escrito expedido en estos lugares nos da una idea del nivel que se tiene y de la visión hacia el público, así podemos tomar una mejor decisión.
Pero debemos prestar mucha atención a lo que leemos, pues todo depende de nuestras convicciones y de lo que buscamos en las lecturas, porque aunque sea existen diferentes enfoques que se le puede dar al leer, podemos encontrar el que nos permite leer más allá de lo superficial o encontrar un refugio en muchos sentidos en las páginas de un libro.

por Leon Poniatowska





La elección del Mesías, los candidatos en Santa Ana Maya

Ya siempre hemos hablado sobre las campañas políticas de la localidad, nos parecen más importantes que cualquier otra porque es a nosotros a quienes nos interesa y nos afecta verdaderamente, además, sabemos a tanteos las costumbres de los candidatos, los analizamos en lo cercano, su preparación y sus intensiones. Así que recurrimos a los juicios sobre la persona o personas que se encargarán en la administración, más que a sus ideales o ideas políticas.
Y es así porque no vemos un despliegue de ideas o proyectos claros, convincentes e incluyentes de la participación civil. El rito de la ahora muy popular “democracia” se reduce a los slogans de campañas, en las que todos o “quieren mucho a su pueblo” o “merecemos el progreso” –después nos dirán qué significa eso de “progreso” o por lo menos cómo lo entienden ellos-. Hay candidatos que incluso se atreven a decir que son los mejores porque son honrados, como si la honradez fuera una característica de la persona o de una administración, sin ver siquiera que la honradez, como virtud, se ejerce constantemente: se hacen cosas con honradez, no se es honrado desde siempre y para siempre. Y, como son honrados, no hace falta que nosotros observemos su desempeño y así no tengamos que entrar activamente a reclamar cuentas claras.
Se nos antoja no participar en el rito de la democracia, no sólo por lo que dice Ambroise Bierce sobre el elector.- “s. aquel que goza del sacrosanto privilegio de votar por un candidato elegido por otros” también por otras consideraciones; -se dirá que en Santa Ana Maya un partido permitió elegir a su candidato de tres opciones (pero cuántos de nosotros postulamos a uno de los tres, a cuántos de nosotros nos representan, cuáles han abierto foros para discutir qué municipio queremos)-.El rito de la democracia se reduce a la mera elección, a la acción de escoger. Sí, esa es la democracia que hasta ahora se ha formulado. Se ha querido separar la “elección” de las “votaciones”. Y se dirá, también, que se elige primero y después se vota, pero entre las propuestas resultaría lo mismo votar por uno o por otro: ¿cuál es la diferencia? Todos van a construir calles, capillas, todos van a poner a una banda de viento los días de fiesta, con suerte muchos mandarán construir gigantescos monumentos de su ego, dudaremos de la honestidad de todos.
Hasta el momento no he visto una propuesta incluyente. No he visto una propuesta educativa, mucho menos una propuesta política. Por desgracia la presidencia siempre se ha tomado como un aparato administrativo en el que a lo mucho se prometen apoyos económicos o administrativos a l@s ciudadan@s. Y es aquí, en su mera tarea de administrar donde también se equivoca, no gasta en las necesidades civiles y si lo hace tiende a ser caprichoso, a regatear la ayuda. Incluso en lo popular (la fiesta patronal y la reapertura) carece de visión de orden y limpieza básicos. Las administraciones en turno no nos dan, ni siquiera de lejos los elementos para que nosotros, l@s ciudadan@s participemos en la vida pública de una forma activa. No nos dan elementos para educarnos –no me refiero a saber leer y escribir, sino a la educación cívica y cultural indispensable.
Todo parece indicar que los señores candidatos se consideran terriblemente buenos en la política, son casi Mesías de la función pública. Ellos y sólo ellos podrán sacar al municipio del atraso y, de pasada, limpiarán hasta los últimos rincones de la suciedad que, según ellos, se esconde en las anteriores administraciones. Vaya idea que tienen de sí mismos. No se conforman con saberse los mejores: quieren que nosotros nos enteremos y les rindamos culto…claro, por eso en sus campañas se hacen acompañar de un nutrido grupo de niños y “organizadores de mítines”. En su extraña lógica, según vemos, el que haga más ruido, lleve más carros al mitin o regale más globos a los niños ganará ¡ellos si saben de política!


por Arin B. R.

viernes, 1 de junio de 2007